¿Qué es un milagro?

Jesús sana a la madre de Pedro por John Bridges
Jesús sana a la madre de Pedro por John Bridges. © Dominio público

Cuando ocurre algo asombroso y excepcional para lo que no hay una explicación racional, se dice que ocurrió un milagro.

Se le llama también milagro a aquello que, por medio de la intervención divina, se manifiesta en tu vida para mejorarla.

A veces, se le llama milagro a algo que simplemente te hace sentir que la vida tiene magia y misterio.

Aunque las definiciones varían, muchas religiones y culturas de ayer y de hoy poseen algún concepto de lo que es un milagro y reconocen los milagros como una realidad.

Origen y significado de la palabra milagro

La palabra milagro viene del latín miraculum, que significa "mirar". Miraculum a su vez proviene de mirari, que significa "contemplar con admiración, asombro o estupefacción". En la antigüedad se le llamaba miraculum a todo aquello que no se podía comprender. Con el tiempo, la palabra milagro ha llegado a ser definida, según el Diccionario de la Lengua Española, como un "hecho no explicable por las leyes naturales y que se atribuye a intervención sobrenatural de origen divino".

Agustín de Hipona, mejor conocido como San Agustín, definió un milagro en De utilitate credendi como algo que "siendo arduo e insólito, parece rebasar las esperanzas posibles y la capacidad del que lo contempla".

Tomás de Aquino, en su Suma de Teología, identifica un milagro como algo hecho por Dios más allá de las causas conocidas por los hombres.

Tipos de milagros

Se puede decir que algunos milagros son dramáticos mientras que otros son sutiles.

Los milagros dramáticos tienden a relacionarse con ciertas acciones, personas, objetos o lugares. Una sanación espontánea al visitar la tumba de una santa o salvarse de un accidente al rezar una oración de ayuda se considera algo dramático.

Los milagros más sutiles se perciben así por ocurrir de manera casual y casi imperceptible. El comprobar que se manifestó una petición que se hizo tres semanas atrás, nos hace pensar que podría ser un milagro o una casualidad. A veces ni siquiera se recuerda que se pidió un milagro y no se reconoce que alguna petición se ha vuelto realidad.

Definiciones contemporáneas de lo que es un milagro

  • Un signo de amor: La creencia en los milagros se basa en la fe. El cristianismo explica un milagro como un hecho sobrenatural sin explicación científica razonable que expresa el amor de Dios hacia los seres humanos.
  • Un cambio de percepción: El libro Un Curso de Milagros propone que los milagros son cambios de percepción. Según este texto, los seres humanos poseen el amor incondicional de Dios y solo tienen pedir para obtener lo que necesiten. Aunque los milagros son efectuados por la Divinidad, el ser humano tiene la posibilidad de lograrlos al pedir la ayuda de Dios.
  • Comunicación con la Divinidad: Para algunas personas, los milagros son la manera en que Dios se comunica con el ser humano. Los milagros, en esta perspectiva, son eventos sobre los cuales meditar para llegar a un conocimiento más profundo de Dios y de sí mismo en el proceso.
  • Una manifestación del pensamiento humano: Los creyentes en la metafísica, la ley de atracción y otras variantes del pensamiento de la Nueva Era, entienden que la divinidad es el amor mismo, una fuerza que responde a las necesidades y deseos de sus creaciones. Los humanos, como seres pensantes, tienen la capacidad de crear su propia realidad y hacer milagros por medio de sus intenciones, pensamientos y emociones. El Universo responde a estos deseos, poniendo en marcha sus leyes con el propósito de cumplirlos.

¿Existen los milagros?

Aunque muchas religiones aceptan la idea de los milagros, otras no creen que éstos ocurran hoy en día. Algunas denominaciones cristianas, como los Luteranos y los Testigos de Jehová, enseñan que los milagros ocurrieron en la antigüedad, pero que hoy en día no son necesarios.

Otras religiones, como la Iglesia Católica Romana, aceptan como parte de su doctrina que los milagros son manifestaciones de Dios y que no son contrarios a la ciencia ya que tanto las leyes naturales como las ocurrencias milagrosas provienen del mismo origen.

Los milagros en tu vida

Aún cuando hayas decidido que los milagros no existen como ocurrencias extraordinarias, puedes mirar a tu alrededor y reconocer los signos de amor que te rodean. Si un milagro es una expresión de amor, entonces todo aquello que despierte esa emoción en ti tiene la posibilidad de efectuar un cambio positivo en tu vida, que transforme tu percepción de las cosas. La existencia de los milagros depende de la definición que cada persona tenga de este fenómeno, y sobre todo, de la fe en la existencia del mundo espiritual.