María Magdalena después de la muerte de Jesús

María Magdalena en Marsella
María Magdalena predica a los pescadores en el puerto de Marsella. © Dominio público

El Evangelio de María Magdalena contiene sugerencias que indican que luego de la muerte y resurrección de Jesús, el apóstol Pedro no mantenía una buena relación con ella. Además, la ocupación romana continuaba y todos aquellos que fueron seguidores de Jesús en vida continuaron siendo perseguidos después de su muerte. Se piensa que por estas razones María Magdalena tuvo que huir de Palestina.

No hay documentos que aseguren cuál fue su destino, pero las leyendas medievales del sur de Francia ofrecen una explicación de lo que pasó después. 

El viaje en barca

Varias leyendas cuentan que María Magdalena salió de su tierra y llegó a la costa del sur de Francia. La barca en que salió, se dice, no tenía ni remos ni timón.

Una de las leyendas cuenta que la barca se dirigió a una isla llamada Ratis en la costa de Galia, el lugar de un templo dedicado a la Diosa en sus formas de Cibele, Artemisa e Isis. 

Ratis se convirtió en Saintes Maries de la Mer, el lugar donde, según la leyenda, desembarcó María Magdalena junto con Lázaro, María de Betania (que para algunos es la misma que María Magdalena) Salomé la madre de Juan, Maximino y José de Arimatea. Los personajes varían según las leyendas.

Por eso se cree que allí en Saintes Maries de la Mer desembarcaron tres marías: María Magdalena, María Salomé y María Jacobi. Desembarcó también una niña llamada Sara, un nombre que quiere decir "princesa" en hebreo. Sara, de tez morena, fue la hija de María Magdalena y Jesús.

Las Marías se separaron para llevar el evangelio a otros lugares. María Magdalena se fue a la Provenza, donde predicó y convirtió a muchos de sus habitantes. Estos cristianos se convirtieron en los cátaros, las víctimas de la primera cruzada debido a sus creencias religiosas que la Iglesia consideraba como una herejía. La herejía era su creencia en María Magdalena como la esposa de Jesucristo. 

Un milagro convierte a los nobles

Según la "Leyenda francesa" de La leyenda dorada, María Magdalena conoció a un príncipe y a su esposa, quienes al principio se resistieron a convertirse. Cuando María Magdalena efectuó el milagro de revivir a la princesa y a su hijo cuando ya se les había dado por muertos, ambos nobles se convirtieron, lo que ayudó a que toda la población del área siguiera su ejemplo. 

La muerte de María Magdalena

María Magdalena pasó sus últimos 30 años de vida retirada en una cueva donde pasaba sus días meditando y rezando. Todos los días, los ángeles la llevaban al cielo para alimentarla, y en el momento de su muerte, la llevaron al cielo. Esta cueva también se ha relacionado al antiguo culto de la Diosa en Europa.

Cuando llegó la hora de su muerte, María Magdalena llamó buscó a San Maximino y tuvo una muerte gloriosa en su presencia. En la cripta de la Basílica de Santa María Magdalena en Saint Baume se encuentra un sarcófago y un relicario con sus restos. 

Se dice que las otras dos marías se quedaron en Saintes Maries de la Mer junto con Sara, que se convertiría en la santa patrona de la ciudad. Hoy en día existe una estatua de una niña pequeña y morena  que todos los años los gitanos sacan en una gran peregrinación con que celebran su llegada a esa tierra. 

Debido a estas leyendas y a las creencias de los antiguos cristianos de la zona, en el sur de Francia existen muchas iglesias que hacen referencia a María Magdalena a través del arte que guardan en sus muros.

Existen más historias acerca de la vida de María Magdalena después la muerte de Jesús. Una relata que se fue a Éfeso y otra que se fue con José de Arimatea a Inglaterra.