El arcángel Uriel

Arcángel Uriel
Mosaico del arcáangel Uriel en la iglesia St. John, Boreham, Wiltshire. 1888, James Powell and Sons of the Whitefriars Foundry. Dominio público

El arcángel Uriel es uno de los siete arcángeles. Se le llama "Ángel de la Presencia de Dios" por ser reconocido como uno de los siete espíritus que están ante el trono de Dios que se menciona en el Evangelio de Juan.

Qué significa Uriel y cuáles son sus atributos

El nombre "Uriel" significa "el fuego de Dios". Representa la fuerza todopoderosa del espíritu de la vida. Su atributo es una llama de fuego que representa su misión de despertar la conciencia de los seres humanos con el fuego de la verdad. Puede llevar consigo un libro o pergamino. Este atributo representa su papel de observador divino. Lleva la cuenta de los sentimientos, pensamientos y actos de los seres humanos durante su recorrido por la vida.

A Uriel se le representa vestido de rojo o anaranjado y dorado, colores relacionados al fuego y a sus cualidades de transformación, destrucción del mal e iluminación espiritual. Son además los colores del Sol, el astro con el que John Milton asocia a Uriel en su obra "Paraíso perdido".

El arcángel Uriel en el cristianismo

El arcángel Uriel era venerado junto con Miguel, Gabriel y Rafael en el cristianismo antiguo. Con el paso de los años surgió el culto a los ángeles. El Papa Zacarías, durante el Concilio de Roma del año 745, prohibió el nombre del arcángel Uriel. Hizo también que se destruyeran sus imágenes en las iglesias de Roma. A pesar de esta prohibición, el arcángel Uriel continuó presente en las mentes de los fieles y aún se pueden encontrar imágenes del arcángel Uriel que datan del siglo XVII en iglesias de América del Sur.

La Iglesia Ortodoxa Oriental venera al arcángel Uriel y lo conmemora junto con los otros ángeles y arcángeles durante la "Synaxis del arcángel Miguel y los otros poderes" el 8 de noviembre. También la Iglesia Anglicana lo incluye entre los arcángeles. La Iglesia Copta, por haber conservado la Biblia Septuaginta, que contiene el Libro de Enoc, siempre ha venerado al arcángel Uriel.

En los evangelios apócrifos de la Biblia, Uriel ayuda a Juan el Bautista a sobrevivir la masacre ordenada por Herodes. Lo lleva junto con su madre a Egipto, y los reúne con la Sagrada Familia. En el Apocalipsis,  es el ángel del arrepentimiento. En la tradición apocalíptica, Uriel tiene la llave del Infierno, que abrirá al final de los Ttempos.

El arcángel Uriel en el Judaísmo

El judaísmo no reconoce oficialmente al arcángel Uriel, pero su nombre aparece en varios textos apócrifos y en las tradiciones místicas. El arcángel Uriel aparece nombrado en el "Libro de Enoc". Uriel intercede ante Dios por la humanidad, en relación a los ángeles caídos y sus hijos, los nefilim. También advierte a Noé del diluvio.

Uriel es mencionado en el "Testamento de Salomón" y en el "Apocalipsis" de Esdras, donde instruye al profeta Esdras sobre la verdad. En "Leyendas de los judíos", fue el ángel que dio nuevo nombre a Jacob. También guía a Abraham y marca las puertas de las casas de los hebreos en Egipto para protegerlos.

En el libro de Adán y Eva, Uriel es el querubín que permanece junto a las puertas del Edén con una espada ardiente para evitar el acceso al árbol de la vida. También es uno de los ángeles que dio sepultura a Adán y a Abel, y es quien saca del Edén a Adán y Eva después de la caída. En las tradiciones místicas, Uriel es el ángel del domingo, el ángel de la poesía, y uno de los sefirot sagrados.

El arcángel Uriel, patrón de los que buscan la sabiduría

El arcángel Uriel es el patrón de los que buscan eliminar la ignorancia. Protege a los maestros, líderes espirituales, sacerdotes, filósofos, rabinos, gurús, ministros y a todos los que aman la sabiduría espiritual. Es el arcángel de la flama rubí. Fomenta el servicio divino y es el líder de los ángeles guardianes. Con su llama divina ayuda a esparcir la verdad y la sabiduría por el mundo.

Todas las cualidades del arcángel Uriel lo hacen el arcángel protector de la espiritualidad, la sabiduría y la devoción por la verdad. Junto con el Ángel de la Guarda, Uriel vela porque el camino del ser humano sea recto y su visión clara. Su llama enciende en el ser el deseo de servir en la misión de despertar la conciencia humana para lograr alcanzar la paz y la gloria de Dios.

Oración al arcángel Uriel

"Glorioso arcángel San Uriel, intercede por mí, y ayúdame a verme libre de todo peligro y toda adversidad. Glorioso arcángel San Uriel, imploro tu continua custodia para alcanzar la paz. Glorioso arcángel San Uriel, envuélveme en tu color rojo y ayúdame a llenarme de tus bendiciones de fuerza, valor, ánimo y resistencia. Protector mío, concédeme la gracia que te solicito (haz tu petición) si es conveniente para el bien de mi alma y de todo el mundo. Acompáñame y guía todos mis pasos hasta alcanzar la vida eterna y el amor divino. Amén."